Debido a qué en esta época moderna todo lo que hagas o dejes de hacer produce cáncer, he decidido compartir con ustedes una cura infalible, económica, para la dama y para el caballero, llévesela güerita, llévesela. No sólo eso, de hecho es la cura infalible para cualquier enfermedad conocida por el hombre, lo único que hace falta es seguir estos sencillos pasos:
1) Consiga un revólver, una cápsula de cianuro (los frijoles sin lavar son perfectos y económicos, ajúa!), un edificio de más de cuatro pisos cercano a una torre de alta tensión junto a la que esté estacionada una patrulla/ambulancia.
2) Tome el revólver en su mano (puede intentar tomarlo como agua de tiempo pere ese tipo de tratamiento no suele ser tan efectivo y tarda más) coloque el cañón del arma debajo de su mandíbula y ponga un dedo sobre el gatillo.
3) Suba hasta la azotea del edificio, si hay elevador ya la hizo, si no hay pues suba las escaleras de a poquito pa' que no se canse o pase un accidente (de nuevo, ese tratamiento no es recomendable, pero allá usted si le hace caso a la competencia).
4) Mire al vacío, rece si gusta a quien prefiera y si no pos no, de tres pasos atrás, corra para tomar impulso y dé un salto para caer justo en los cables de alta tensión.
5) MUY IMPORTANTE: Esto requiere de extremo cuidado para el correct0 desarrollo de la operación, así que ponga atención: Mientras se proyecta hacia el éter, degluta la cápsula de cianuro volátil mientras dispara el arma, todo en perfecta sincronía.
6) Si lo hizo bien, debe tener un agujero humeante de unos milímetros de espesor atravesando su cabeza, el cual debe haber perforado su bulbo raquídeo, mientras el cianuro disuelve su tráquea
y miles de voltios recorren su cuerpo (recuerde revisar el amperaje de la torre, ese el verdadero factor vital), y en unos cuantos segundos un objeto extremadamente duro golpeará todo su cuerpo rompinedo sus huesos y sus órganos internos. No tema, sólo es el suelo.
7)Para este punto, ya debe estar curado. No obstante, de haber sido muy enjundioso en el segundo inciso del paso 4, puede que no sea así. Para eso la patrulla/amubulancia. Los amables y serviciales oficiales/paramédicos lo torturarán, desvalijarán, violarán, secuestrarán, inculparán, destazarán, curarán y llevarán en un apacible terreno baldío o a la Semefo (no necesariamente en ese orden). Estas últimas dos locaciones son esencialmente lo mismo, excepto que en la segunda pueden repetir la operación para estar seguros de que el procedimiento médico haya sido exitoso (con particular atención al tercer y sexto paso).
8) ¡Listo! De nada, manden fotos o escriban para contar sus experiencias post-operatorias, sus comentarios son valiosos y estamos ansisos por conocerlos. ¡Oh, ya han llegado mis sirvientes! ¿Tan temprano y ya es hora de ponerme traje, Jaime? Ah, claro, es sábado, aunque insisto en que acortes estas mangas, me llegan hasta la espalada y estos gemelos de cuero alaragado tan poco elegantes siempre se entrelazan y no puedo mover mis brazos, asegúrate de que le den 20 azotes al sastre, y si vueleve a perder su trocito de pan en el queso no hay más remedio, con todo el dolor de mi páncreas hay que echarlo al fondo del lago con pesos atados a los pies. Estoy cansado de dar consulta, llévame a mis aposentos y tráeme la cena.
Muéstrales la salida a estas amables personas, sólo adviérteles del cancerbero de la entrada, se pone de un humor infernal cuando no le ofrecemos una hecatombe semanal, pero está particualrmente obeso, le hará bien, igual no importa si destripa a un mortal o dos, ¿cierto?
lunes, 7 de julio de 2008
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1 comentario:
¡El cianuro no puede disolver tráqueas!
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